sábado, 4 de junio de 2011

Cosa de Niños...

Cosa de niños
Emiliano se aproximaba a su cumpleaños número 4, Natalia y yo buscábamos el lugar idóneo para organizar la fiesta, queríamos un salón y recorrimos cerca de 5, nada nos convencía, entrábamos a casas adaptadas para dicho fin, y sólo veíamos escaleras sumamente peligrosas, salidas difíciles de alcanzar en caso de un siniestro, puntas que sobresalían sin protección de muebles y juegos… y sólo íbamos a estar ahí unas cuantas horas, nuestra prioridad eran los niños invitados, que nada diera espacio para la tragedia…

Mi papá tal vez no de una manera correcta nos inculcó el no correr para atravesar una calle y nos describía el momento en que un conductor distraído no nos hubiera visto caer y cómo el carro pasaría sobre de nosotras, destrozando nuestros cuerpos, gesticulaba con cara de loco y hacía voces acompañando el consejo, igualmente para correr con un lápiz en la mano, masticar chicle subiendo las escaleras, me dijo: "te puedes tropezar y como reflejo cerrar violentamente la lengua y hasta ahí quedó tu lengua" , tijeras, vasos, botellas, escuadras, compases, eran armas mortales en potencia en la boca de mi papá, la lección la aprendimos bien.

Los padres o cualquier adulto que esté a cargo de un menor y sobre todo de bebés e infantes es el primer responsable de la seguridad de su niño, no estoy por la criminalización de las víctimas… nosotras nos tomamos 1 mes para buscar un salón de fiestas el cual iba a ser ocupado por única vez y unas cuantas horas, ¿por qué los padres no se tomaron tiempo para buscar un lugar aceptablemente seguro para sus hijos? ¿por ignoracia?¿ por pensar, en que somos inmortales hasta que la vida y las circunstancias nos demuestran lo contrario?

Es lo único que puedo decir a 2 años de la tragedia de la Guardería ABC en Hermosillo…

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